Capítulo N° 68

Capítulo Nº 68 (Sesenta y ocho):

Lali: Sí pero no sé si tengo que creerle ni a vos ni a ella… -te penetró con la mirada- Digo, hoy cuando llegaste lo primero que hiciste fue buscarla a ella… -Sentenció irónica y vos la miraste-

Peter: Pero ella está con Nico. No te dijo nada? –Preguntaste indignado-

Lali: Y si no estuviera con él? –hizo una pausa- Estarías con ella? –vos bajaste la cabeza- Eso es un sí? –Indagó indignada-

Peter: Lali yo… -ibas a hablar pero te interrumpió-

Lali: No, no digas más nada… -hizo una pausa- Con eso me dijiste todo lo que necesitaba saber… -Aclaró y su voz se tornó gangosa- Lástima que no me lo dijiste antes –Agregó y vos la miraste-.

Peter: No entiendo… Para qué? -te miro confundido-

Lali: Para terminar con lo nuestro –Dijo sin filtro-.

Peter: Yo no quiero terminar con vos Lali… Por favor, no me hagas esto… -Pediste con tus ojos cristalinos-.

Lali: Te acordaste tarde –Respondió ella mientras se le derramaban algunas lágrimas- Ya está… -Dijo e hizo una pausa- Y lo que más me duele es que después de tanto luchar para estar juntos y después de tanto sufrir hoy terminemos de esta manera… -hizo nuevamente una pausa- pero las cosas se dieron así… -estaba acongojada- y ya no hay vuelta atrás –completó y secó algunas lágrimas-. Va a ser lo mejor para los dos… -Vos negabas con tu cabeza. No querías que te dejara- Chau Peter… -Fue lo último que dijo entre sollozos y se fue-

Vos por tu parte, cerraste los ojos con fuerza para dejar escapar todas esas lágrimas que retuviste tanto tiempo y apretaste tus puños. Sinceramente te querías matar. Es verdad que estabas un poco confundido. El beso de Euge te había quedado retumbando en la cabeza pero no podías traicionarte ni a vos mismo, ni a Lali ni a Nico. Sinceramente, estabas perdido. No sabías para dónde escapar.

En ese momento lo único que atinaste a hacer fue secar esas lágrimas rebeldes que rodaban sin cesar por tus mejillas y salir casi corriendo del lugar. Notaste que tus compañeros te miraron y te gritaron pero no querías hablar con nadie por el momento. Y menos en presencia de Euge.

Lali.

Listo, lo que habías sospechado y lo que tanto te carcomía la cabeza estaba confirmado. A Peter le gustaba Eugenia y vos no podías hacer nada en contra de eso. Era innegable que la rubia era hermosa, tenía un físico bastante voluptuoso y además se notaba que era buena persona. Vos ya habías hablado con ella y el problema justamente no era Euge.

Vos no podías estar junto a una persona que no estaba seguro de sus sentimientos y que te dice que te ama pero que gusta de otra y siente cosas por ella. En este momento necesitabas un tiempo para pensar y analizar cómo seguirían las cosas de ahora en más.

…

Dos días pasaron de aquel acontecimiento y vos te encontrabas en tu casa, te habías levantado hace un rato pero no te encontrabas sola. Tu hermano Agustín te estaba acompañando en este momento tan duro para vos.

Agus: Hacía cuánto que no compartíamos un desayuno de hermanos no? –Comentó, vos lo miraste y sonreíste-

Lali: Se te extrañaba eh… -Dijiste y él te sonrió- Claro, ahora que estás con la flaca estás más pollerudo que nunca… -Agregaste y él se quejó-

Agus: Cómo es eso? –Cuestionó frunciendo el entrecejo- Si soy pollerudo, como vos decís, no estaría acá, desayunando con vos… -hizo una pausa y te miró obvio- y además vos sabes cómo es la flaca –asentiste mientras comías una tostada untada en mermelada light- Pero así y todo la amo… -Dijo tierno y vos le apretaste sus cachetes-

Lali: Sos más tierno cachetes… -le sonreíste-

Agus: Y vos?... –Preguntó y te miró. Vos también- Con el temita de Peter cómo la vas llevando? –Interrogó y tomó un sorbo de su café-

Lali: Como puedo… -Respondiste y suspiraste- No puedo hacer otra cosa Agus –Él te miró concentrado- Si a él le pasan cosas con Eugenia no puedo ir en contra de eso… -hiciste una pausa y bajaste la cabeza- Y me duele… me duele muchísimo –tu voz estaba gangosa- porque yo a él lo amo entendes? –él asintió- Pero no lo puedo perdonar –Dijiste firme y una lágrima se deslizó por tu mejilla-. Siento que no fue sincero conmigo como yo siempre lo fui con él… -agregaste y más lágrimas comenzaron a caer- No entiendo para qué me quiso dar explicaciones cuando en realidad no las había. Estaba más que claro que le gustaba… -estabas acongojada- Yo vi como le siguió el beso, me entendes? –elevaste apenas la voz con bronca y te señalaste-. Y te juro que por más que me duela en el alma y me parta en diez mil pedacitos, no voy a volver con él –afirmaste a la vez que negaste continuamente con la cabeza-

Agus: Yo te entiendo hermana… -te dijo y vos lo miraste con tus ojos llenos de lágrimas- pero no crees que se deben una charla? –vos lo miraste como diciendo ‘me estas jodiendo?’- No me mires así La… -pidió- Digo, para aclarar las cosas y llegar a un decisión… -hizo una pausa- juntos –sugirió y vos negabas-

Lali: No Agus… Para mí ya está todo más que aclarado… -hiciste una pausa y bajaste la mirada- Y cuanto menos lo vea va a ser mejor… -hiciste una pausa y te quedaste pensativa-

Agus: En qué pensás? –Preguntó curioso e interesado-

Lali: No quiero volver a pasar por lo mismo Agus… -dijiste mientras lo miraste. Y esta vez largaste en llanto. Él te arropó en sus brazos-

Agus: Sh, tranquila La… -dijo mientras acariciaba tu espalda- Yo estoy con vos sabes? Y no voy a permitir que nadie te haga sufrir… -te dijo y salieron de aquel abrazo-

Lali: Gracias Agus… -le dedicaste apenas una sonrisa- pero en este momento siento que estoy volviendo a revivir la misma historia que con Benjamín… -agregaste y tu hermano te miro concentrado y apenado- con la diferencia de que ahora me pude dar cuenta a tiempo… -dijiste con algo de bronca y algo más tranquila- No quiero ser más esa persona a la que todos toman por estúpida e ingenua… -secaste algunas lágrimas-

Agus: Pero me parece que hay una cosa que no estás diciendo y no sé si es por rechazo o por no querer reconocerlo…-dijo y vos lo miraste. Sabías a qué se refería- A vos con Benjamín no te pasaba lo que te pasa con Peter… -agregó- y me parece que te estás haciendo la tonta –secaste un par de lágrimas más, inevitables, y bajaste tu mirada-. Vos a Peter lo amas y no me digas que con Benjamín te pasaba lo mismo porque yo sé que no… -te miró obvio- Porque sos mi hermana y te conozco de pe a pá sé que su amor es especial y distinto. Nunca sentiste lo que sentís por él por nadie… -y vos lo miraste triste- Y si, ya sé que es un naipe que se ganó todas las rifas para pegarle un buen trompazo pero él es tu vida y es tu verdadero amor La… -te dijo y vos mantenías tu vista baja- Ey Lali, mirame… -Pidió y te agarró del mentón haciendo que lo miraras- No lo dejes escapar, por favor… -aconsejó y vos lo miraste-

Lali:…

Continuará.