Capítulo N° 56

Capítulo Nº 56 (Cincuenta y seis):

Lali: Vos me querés decir que Peter me da motivos? –Pregunté seria y expectante-

Rochi: No Lali, tampoco quiero decir eso… -Y me miró- Mira, todas las parejas tienen peleas por celos hasta Gas y yo que parece que somos dos tiernos que están todo el día pegotes –Yo sonreí- Pero que se yo, a veces tenemos que dejar esa maldita costumbre y disfrutar un poco… Vida hay una sola no te parece? –Me miró obvia y ambas sonreímos-

Lali: Sí, tenés razón… -Hice una pausa- Pero a vos no te puedo mentir –Me miró sin entender mientras me apoyé contra el mueble- Desde que pasó lo que pasó con Benjamín tengo ese miedo constante de que otra vez me vuelva a pasar lo mismo y se vuelva a repetir la misma historia… -Esclarecí mi voz- Y no es que a Peter no lo ame. Nono, yo por él siento algo que nunca sentí por nadie y es algo especial, único pero no sé… no quiero pasar por lo mismo de nuevo –Dije triste-

Rochi: Haber La… -Se colocó a mi lado- Vos confías en él? –Preguntó. Yo solo asentí- Bueno, entonces no tenés por qué darte rosca con eso Lali… -Me miró- Ustedes dos se aman y es imposible que haya amor como el suyo –Y yo la miré extrañada- Sí La, se re nota que el de ustedes es un amor especial, como vos decis –Yo sonreí- No es un amor como el de los demás y no es que esté despreciando a las demás personas porque cada pareja es un mundo distinto pero yo siento y creo que el amor de ustedes es verdadero y porque es verdadero va a ser eterno siempre… -Dijo y yo lagrimeé- Y si no mira y escucha a las fans cómo gritan cada vez que ustedes dos se acercan, se miran, ríen. Eso es porque hay una química entre ustedes que no se puede explicar con palabras… -Agregó-

Lali: Enserio me decis? –Pregunté algo rara. La rubia solo asintió- Es que no sé… nunca lo vi de esa manera pero es verdad que todo eso que vos decís se nota? –Pregunté expectante-

Rochi: Si La… Enserio, si no no te lo estaría diciendo –Dijo y tomó mis manos- Por eso tienen que dejar esas pavadas de los celos de lado y seguir construyendo día a día ese amor tan distinto pero a la vez tan hermoso que tienen con Peter –Me sonrió y yo la abracé-

Lali: Gracias Ro… Enserio –Y salimos de aquel abrazo- Sí, porque pensé cualquiera de vos y sinceramente no te lo merecías –Ella sonrió, mordió su labio y luego se tiró en mis brazos-

Rochi: Ya está Lali… Ya pasó –Saliendo de aquel abrazo- Vos sabes que te quiero mucho no? –Asentí- Demasiado… -Agregó- Y también sabes que me vas a tener siempre… -Yo asentí nuevamente- Entonces, todo arreglado –Ambas sonreímos ampliamente-

Lali: Yo también te quiero muchísimo rubia… -Dije y se abrió la puerta del camarín. Ambas miramos-

Pablo: Están listas chicas? Llegó la combi… -Las dos asentimos, nos sonreímos, tomamos nuestras cosas y salimos del camarín-

Afuera nos encontramos con todos los chicos. Al acercarnos a ellos Peter no tardó en preguntar ya que notó mi cara pensativa.

Peter: Amor, estás bien? –Me susurró-

Lali: Perfecta –Con la voz clara, lo miré, le sonreí y luego nos subimos a la combi- Cuando lleguemos tengo que hablar con vos… -Él me miró preocupado-

Peter: Por qué? Qué paso? Es por lo qué paso en mi cama… -Lo interrumpí-

Lali: Nono. No es nada sobre eso. Es otra cosa… que nos involucra a los dos –Aclaré- Y que me dijo Rochi… -Sonreí-

Peter: Me tengo que preocupar? –Preguntó asegurándose-

Lali: No, para nada… -Le sonreí y le di un pico-

El trayecto al aeropuerto fue bastante corto. Todo se hacía más placentero y más rápido entre amigos, casi hermanos, y por supuesto, un novio. El viaje en avión fue aun más corto ya que en todo el transcurso del recorrido me dediqué a dormir sobre el pecho de mi novio el cual me hacía mimos en todo momento. Al llegar a Ezeiza, un poco dormida aún, todos nos encargamos de tomar nuestras valijas e irnos a casa, cada uno a la suya, obviamente. Así que nos despedimos todos y cuando llegué a Rochi, le regalé un cálido abrazo de mi parte y un ‘Gracias, de nuevo. Sos lo más’. Ella solo respondió con una sonrisa. Por mi parte, invité a Peter a ir hasta mi casa, el cual no se negó, y un poco escondiéndonos de las cámaras, la prensa y las fans Pablo fue el encargado de conducir hasta mi gran casa. Una vez allí le agradecimos y luego con mi novio ingresamos a mi casa.

Lali: Hogar, dulce hogar –Dije y suspiré-

Peter: Lali… -Hizo una pausa y yo lo miré- Vos estás bien? –Preguntó extrañado-

Lali: Mejor que nunca –Contesté con una sonrisa amplia en mi cara-

Peter: Segura? –Repreguntó- Digo porque desde que salimos del estadio de Rosario que estás como un poco más… -Lo interrumpí-

Lali: Más contenta? Más feliz? –Completé y me acerqué a él enredando mis manos en su cuello-

Peter: Más loca –Dijo, me tomó de la cintura y rió-

Lali: No te quieras aprovechar de mi buen humor eh… -Advertí- Igual nada me va a hacer cambiar la felicidad que tengo encima –Dije y lo miré fijo-

Peter: Se puede saber qué fue lo que paso para que estés así? –Preguntó curioso-

Lali: Vení y te cuento –Le di un beso, lo tomé de la mano y lo dirigí a mi habitación. Luego, hice que se siente para después hacerlo yo a su lado- Haber… Cómo empiezo… -Hice una pausa-

Peter: Dale La… Me estás poniendo nervioso –Acotó y yo sonreí-

Lali: Es que no sé por cuál de todas las cosas que me dijo Rochi empezar porque fue muy hermoso lo que me dijo… -Sonreí ampliamente al recordar ese momento-

Peter: No me digas que Rochi te declaró su amor? –Bromeó y yo reí-

Lali: Que tontito –Deposite un pico sobre sus labios-

Fue así que nos acomodamos a nuestra manera y le comencé a contar a Peter todo lo que habíamos hablado con Rochi en aquel camarín. En el que nunca me iba a olvidar de esa charla que tuvimos con la rubia. A mi novio no podía mentirle así que cuando digo que le conté todo es absolutamente todo, hasta lo de Benjamín.

Continuará.