12 de febrero de 2012

Capítulo N° 15


Capítulo Nº 15 (Quince):

Al terminar esa jornada de trabajo, yo me despedí de Rochi y de mis compañeros y me dirigí hacía mi casa. La verdad es que no veía la hora de regresar a mi hogar. Necesitaba estar solo, pensar y reflexionar sobre lo que iba a hacer con mi vida de ahora en más. Por eso mismo, cuando llegué, me metí inmediatamente bajo la ducha calentita. Mientras la lluvia caía sobre mí, las gotas de ésta se mezclaban con algunas lágrimas que caían por mi rostro y que no podían distinguirse. De pronto, siento que unas manos rodean mi cintura y rápidamente me di vuelta. Era Rochi.

Peter: Rochi –exclamé- Qué haces acá? –pregunté tratando de disimular y no hacerme el sorprendido-
Rochi: Vine a que nos relajemos juntos –me dijo sensualmente pero rápidamente cambió su expresión de la cara- Gordo… a vos te pasa algo? –me miró extrañada- Por qué estás llorando? –afirmando lo que decía-
Peter: No estoy llorando Rochi… -e hice una pausa- estoy resfriado nada más –mentí cosa que odiaba hacerlo- Y me duele bastante la cabeza… -me interrumpió-
Rochi: Yo te voy a ayudar a que se te pase –agarró mi cara por las mejillas y me besó desenfrenadamente-
Yo le seguí aquel beso por unos segundos más hasta que decidí detenerme ya que no quería hacer algo de lo cual me iba a arrepentir toda la vida.

Peter: Para Ro… -con los labios aún pegados- Enserio, pará –despegándonos-
Rochi: Qué? Qué pasa? –cuestionó sorprendida-
Peter: No tengo ganas hoy, enserio. No es por vos pero no me siento muy bien –le dije lo más sutil posible-
Rochi: Pero ya te dije que yo puedo aliviarte todos los dolores –insistió, volvió a besarme para después arrinconarme contra una de las paredes de la ducha pero nuevamente la frené-
Peter: Rochi no… -tomé su carita y la hice despegar de aquel beso- Enserio, hoy no puedo. No me siento bien sabes? –y le di un pico- Me dejas terminar de bañarme? Yo ahora salgo –le dediqué una sonrisa disimulada a lo que ella asintió no muy convencida-

Fue así que ella salió de la ducha y yo quedé allí dentro largando un suspiro enorme de agitación y nerviosismo por toda la situación. Antes de salir, me recompuse lo mejor que pude y allí, en la habitación, me la encontré a Rochi, ya vestida, sentada en mi cama derramando algunas lágrimas.

Peter: Mi amor… no quiero que te pongas así… -y me interrumpió-
Rochi: Peter… -dijo entre sollozos- vos me estás rechazando a mí? –preguntó con un hilo de voz-
Peter: -hice una pausa y la miré con culpabilidad-
Rochi: Contest… -la interrumpí-
Peter: No Ro… -y me acerqué a ella para sentarme a su lado- cómo te voy a estar rechazando? –mentí nuevamente. Parecía que era lo único que sabía hacer desde el último tiempo- Yo ya te expliqué que estoy resfriado, sumado a que estamos laburando mucho y bueno, se junta todo –disimulando- Es eso nada más. No busques cosas donde no vas a encontrar Ro, por favor te lo pido –secando algunas lágrimas que se le derramaban- Quiero que estemos bien, puede ser? –no podía creer lo que estaba haciendo. Rochi no se merecía que yo jugara con ella de esta manera-
Rochi: Si, está bien amor –y me miró- Disculpame, pasa que yo me embalo mal y pienso cualquier cosa – dijo con culpa. Yo era de lo peor- Te amo sabes? –agarró mi cara y me besó- Mmm… -pico- vamos a ir mañana a la fiesta no? –preguntó contenta-
Peter: Qué fiesta? –indagué, no entendía a lo que se refería-
Rochi: Ah, Lali no te aviso nada? –negué- Mañana hace una fiesta en su casa (Autora: Todos los chicos vivían en countrys distintos) para relajar un poco y pasarla bien una noche.

Continuará.

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