Capítulo N° 18

Capítulo Nº 18 (Dieciocho):

Cuando pasamos, levanté la cabeza y allí me encontré con una imagen muy desafortunada para mí. Lali y Benjamín estaban besándose muy apasionados mostrándose delante de toda la gente. Eso me terminó de destruir por completo hasta que tuve que poner la mejor cara cuando ambos se separaron y vinieron hasta Rochi y hacia mí.

Lali: Chicos, como andan? –Saludándonos a ambos-

Rochi: Bien y ustedes se ve que también no? –sonriendo pícara a lo que ellos se miraron, sonrieron y se dieron un pico como sin darse cuenta de que me lo estaban refregando por la cara-

Lali: Bueno, sírvanse lo que quieran. Nos estamos viendo –dijo casi gritando por el volumen de la música y se perdió entre la gente con Benja-

Rochi: Mi amor, vamos a bailar? –me dijo contenta a lo que yo no emití respuesta ya que estaba con esa imagen en mi cabeza- Ey, mi amor? –haciendo chasquidos en mi cara- Estás bien? Qué te pasa? –preguntó preocupada-

Peter: No nada, vamos a bailar si querés –y nuevamente zafé de la situación-

Fue así que comenzamos a bailar. Ella estaba muy entusiasmada y con mucha pila mientras yo trataba de bailar aunque lo que menos quería hacer era eso. Pero en un momento le dije a Rochi que quería ir al baño, lo que ella consintió y se fue a hablar con Cande para no quedarse sola mientras yo me encaminé al baño que quedaba en la planta alta de la enorme casa. Una vez allí adentro, me encerré con llave y lo primero que hice es mirar en el espejo lo patético y estúpido que soy. No podía creer que me estuviera pasando esto a mí. Encima que era una fiesta a la cual no quería venir, me tengo que bancar que Lali esté besuqueándose con ese flaco todo el tiempo. Los celos me estaban matando y ya no podía controlarlo. Y encima estaba hermosa, más de lo común. Pero me dije basta, puse fin a esto, me enjuagué la cara, me sequé y salí. Para desgracia mía allí me encontré a Lali que venía desde su cuarto.

Lali: Ah Peter, te estaba buscando –me dijo acercándose a mí-

Peter: A mí? Pará qué? –pregunté curioso-

Lali: No sabes dónde está Benja? Lo estoy buscando hace bastante y no lo encuentro. Por ahí vos lo viste –un tanto preocupada-

Peter: Qué pasa Lalita? –acercándome más- Te anda faltando un hombre? –dije canchero-

Lali: -y me miró extrañada a lo que después entrelazó sus manos en mi cuello y me miró fijo- Sabes que sí? –la miré canchero y me acerqué más aún sintiendo por primera vez su respiración- Pero además sabes una cosa? –y la mire como diciendo `que`- Se está sorteando una rifa y vos te ganaste todos los números –y me pegó un rodillazo en mis partes bajas- Imbécil –me gritó enojada-

Fue así que se fue bastante enojada dejándome a mí con un dolor tremendo pero por suerte a los minutos pude reincorporarme bastante bien y bajé otra vez a la planta baja en busca de Rochi. Y entre tanta búsqueda nuevamente me la encontré a Lali, quedando frente a frente, en el enorme jardín de la casa. Ella no dijo nada, solo me miró desafiante y quiso seguir su camino pero me interpuse y la agarré del brazo.

Peter: Lali, pará –agarrándola del brazo-

Lali: Qué querés? –dijo seca- Soltame –pidió y yo lo hice-

Peter: Quería pedirte disculpas por lo que paso. Te juro que no fue mi intención decirte eso ni mucho menos que te ofendas pero no estoy pasando por un muy buen momento y últimamente estoy en cualquiera –dije totalmente arrepentido-

Lali: Sí, sos cualquiera Pedro –con sus manos en su cintura- Te juro que me esperaba esto de cualquier persona menos de vos –totalmente indignada-

Peter: Por eso Lali, disculpame. Vos sabes que no soy así y sé que me tengo bien merecido el rodillazo pero por favor perdoname. No va a volver a pasar. Te lo prometo –extendiendo mi mano-

Lali: Sí, está bien –estrechando su mano para agarrar la mía y aceptar mis disculpas- Igual perdón por el rodillazo. Te dolió mucho? –un tanto culpable-

Peter: No, no es nada. Igual lo tenía bien merecido –y reímos ambos- Entonces… amigos como siempre? –y nuevamente estreché mi mano-

Lali: Naa, vení –y me abrazó- Por primera vez entramos en contacto y la sentía tan cerca de mí- Bueno –saliendo ya de aquel abrazo- me parece que… -y de repente empezamos a escuchar gritos desde adentro que exclamaban el nombre de nuestra banda, ‘Teen Angels’.

Continuará.